Recientemente la Asociación Europea de Urología engloba los síntomas molestos en relación con la micción en un concepto denominado “Síntomas del tracto urinario inferior (STUI)”. Este hecho se debe a que gran variedad de patologías urológicas tienen una sintomatología común. Cuando aparecen los STUI debe de buscarse cuidadosamente la causa para proponer un tratamiento correcto. Los síntomas que se engloban dentro de los STUI se clasifican en 3 grupos y son los siguientes:
La causa más frecuente en varones de STUI es el agrandamiento prostático benigno (hiperplasia benigna de próstata) que cause una obstrucción a la salida de la orina. Sin embargo existen otras muchas patologías que pueden producir STUI y por lo tanto, ante la presencia de STUI deben estudiarse todas las posibles causas para afinar en el tratamiento. Otras patologías que produzcan STUI son: vejiga hiperactiva, poliuria nocturna, hiperactividad del detrusor, infección del tracto urinario, disfunción miccional neurogénica, cuerpo extraño en el interior de la vía urinaria, prostatitis, estenosis de uretra, tumor vesical, litiasis ureterales, etc. Por ello además de un estudio básico con ecografía abdominal, urinocultivo y sedimento, y analítica completa, se debe valorar la realización de cistosocopia para estudio endoscópico de la via urinaria baja, flujometria y residuo postmiccional para valorar la capacidad de vaciado vesical e incluso una ecografía transrectal para valorar la mofología y tamaño prostático.
Además son de gran utilidad con cuestionarios de calidad de vida como el IPSS, para cuantificar la repercusión sobre la calidad de vida que producen los STUI. Por último, un diario miccional de 3 días nos aportará información muy valiosa del comportamiento de la vejiga y los síntomas que produce en el paciente.